viernes, 9 de noviembre de 2012

Carne

Mi carne huele a sexo por las noches
aquellas noches en que la luna se empecina en salir
y contarme lo que esta sucediendo
a cada momento en tu habitación,
ahí donde no te acordas de mi
yo desde acá me acuerdo siempre de vos.
Mis dedos se derriten rozando mi piel
pensando que en un pasado fueron tus manos
un pasado donde el silencio no existía
en cada encuentro había lucha
carne, fuego, deseo, mordiscos, destrozos.
La última vez lloré sin que me vieras
aunque luego me preguntaste que me pasaba,
lloré porque sabía que era la última vez de todo
lloré porque sabía que ya no había un mañana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario