jueves, 27 de marzo de 2014

YOUR FINE PETTING DUCK

Una noche, solo una noche. A veces basta solo una noche para que el corazón la vida te cambié.
Una noche, una canción, no más de cuatro acordes, una enorme y bella sonrisa. La sonrisa más linda del mundo.
Que te dejen ver que tus posibilidades de amar a alguien y entregarte al vacío *bastante lleno* es posible. Porque esa sonrisa partía la tierra, el planeta. Todo en un mismo continente pero tan lejos.
Un cielo que ya no nos une, o no lo une, a mi si me une.
Cada vez que el deseo abunda mi sangre es su rostro en el que pienso en el último suspiro. Un amor que nada lo sabe, un amor que nada lo ve, un amor que no toco superficie.
Fueron canciones que se convirtieron en sentimiento de carne y hueso y perfumes que no llegué a sentir porque el aire no quiso traerlo.
Me invade una tristeza a lo desconocido, como así también en algunas cosas me invade un miedo que no conozco.
Tu mirada destruyó miles de puentes que ya no existen, tu mirada me acerco a un mundo redondo pero que nunca se cruzan. Si tan solo podría verte una vez más. Pero a veces el destino es malvado sabio, y por algo nos separa. Por algo nos decanta, por algo esparce nuestras moléculas en otros cuerpos que no somos nosotros.
Hoy te extraño más de lo que debería en un mundo imposible.

*but you don't believe in what's really there*

2 comentarios:

  1. que lindo que escribis, me encanta!!
    un abrazo desde Roma
    Anabella
    my washi tape

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    Respuestas
    1. Recién veo tu mensaje... de casualidad, no se porque no me llegó aviso.
      Muchas muchas gracias! ♥
      Beso!

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